Para obtener las proyecciones de la oferta de empleo por tipologías de ocupación ha sido necesario determinar, por una parte, el volumen total de población activa y, por otro, la evolución de las tipologías de cualificación de dicha población.
Partiendo de la hipótesis de que estas tipologías de cualificación difieren por tramos de edad y sexos, el modelo de proyección de la oferta ha tomado como referencia los valores de población por sexos, distribuida a lo largo de seis tramos de edad diferenciados (16 a 24; 25 a 34, 35 a 44, 45 a 54, 55 a 64 y 65 y más años).
Los valores a futuro de los niveles de población total se han obtenido de los escenarios de proyecciones demográficas elaborados por NASTAT o el INE, mientras que para las tasas de actividad específicas se plantearán modelos de regresión donde las tasas masculinas dependen de la dinámica de la demanda (% cto. de la ocupación total, tasa de ocupación), de las perspectivas de evolución general de la tasa de actividad masculina a nivel agregado (proyecciones de CEPREDE), de la propia dinámica de la tasa (valor en el periodo anterior o diferencia sobre tasa unitaria) y/o una tendencia determinista.
Por su parte, para las tasas de actividad femeninas se plantearán modelos de convergencia con respecto a las tasas masculinas en los tramos de edad equivalentes.
Al igual que en el caso de la demanda, una vez obtenidas las proyecciones de los totales de población activa por tramos de edad y sexo se han analizado y proyectado a futuro las estructuras de cualificación para cada tramo de edad y sexo
Finalmente, aplicando estas estructuras a las proyecciones de población activa se obtendrían las estimaciones de oferta de trabajadores en cada tipología de cualificación.
